Los revestimientos son una pieza esencial en la decoración de interiores que permite dotar al espacio del aspecto con el que soñamos. Por eso, si estás pensando en hacer un cambio de look a tu estancia, los azulejos con formas singulares pueden ser tu mejor aliado.
Elegir azulejos para los revestimientos tiene grandes ventajas: acabados originales, efectos ópticos, texturas y combinaciones infinitas y estancias que parecen más amplias.
Las opciones son casi infinitas, pero arriesgarse con los diseños más atípicos es pura tendencia.
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Azulejos hexagonales
Esta forma de azulejos nos devuelve al pasado, a la década de los años 50, cuando uno de los formatos más comunes de baldosas era precisamente el hexágono. Y es que esta forma parece que no pasa de moda gracias a todas las reinterpretaciones que va adquiriendo con el paso del tiempo.
La colección Clinker de Botteganove destaca por su alta resistencia al calor. Rica en manganeso, reacciona de manera particular en combinación a algunas veladuras, de las que se obtienen colores de lo más vibrantes.
La versatilidad es la palabra que define a este tipo de azulejos. Se pueden utilizar en todas las dependencias de la casa y conseguir resultados completamente opuestos: minimalista, rústico, clásico, vintage, chic, etc.
Una opción ideal para darle un toque especial a cualquier superficie de tu hogar.
Azulejos en forma de pétalo
Y del hexágono pasamos al pentágono para introducir una colección de lo más especial. Botteganove presenta su colección Petali, azulejos con esquinas suaves y curvaturas en la superficie que ofrecen un efecto tridimensional.
Geometría abstracta, superposición de esmaltes y óxidos inspirados en la naturaleza que dotan a la estancia del efecto ¡wow!. ¿Lo mejor? Son combinables entre sí y están disponibles en pequeño o gran formato.
Azulejos singulares, atemporales y que crean superficies decorativas llenas de colores y creatividad.
Azulejos con forma de pluma
Inspirada en el plumaje de las aves, la colección Plumage nos propone un equilibrio entre lo contemporáneo y lo tradicional. Azulejos tridimensionales de cerámica decorada a mano, o de porcelana de Limoges teñida en arcilla.
Las combinaciones que se generan al mezclar estos azulejos tridimensionales son infinitas. Y el resultado, fascinante. Estancias llenas de formas, texturas, colores y líneas que consiguen un efecto inesperado.
Un producto de excelencia artesanal, totalmente personalizable que dará un toque especial al espacio en el que se encuentre.
Como ves, encontrar el azulejo que más se ajuste a tus necesidades y gustos no es sencillo, por ello apoyarse en profesionales es clave. Ven a visitarnos a nuestro showroom de A Coruña y te mostraremos todas las posibilidades que estos azulejos ofrecen para que tus espacios luzcan pura tendencia, elegancia y sofisticación.